Mi hija y yo disfrutando un poco de Yerba Mate

No Hay Nada Que La Yerba Mate No Pueda Resolver: Una Historia De Obesidad, Amistad Y Paternidad

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No hay nada que Yerba Mate no pueda resolver

No existe nada que la yerba mate no pueda solucionar, sobre todo si se acompaña de un excelente libro y buen rock. Así lo hago a diario en mis horas laborales en Biblioteca, con mis futuros colegas de la carrera de bibliotecología, en el estudio de grabación o en casa apreciando la naturaleza. Recuerdo que la razón principal por la cual comencé a beber yerba mate fue mí sobre peso llegando casi a los 100 kl. Me vi en la obligación de cambiar mis hábitos alimenticios por lo que opté a una dieta 100 % vegana, integrando la divina yerba dentro de la misma, desde ese momento, fue amor a primera vista notando un cambio en cosa de meses logré bajar varios kilos y sentirme bien conmigo mismo tanto fuera como por dentro por lo que podrán imaginar que desde ese momento nunca más deje de beber esta infusión de los dioses.

En la vida existen pequeños detalles que hacen la diferencia, detalles que afloran un sentir de bien estar y que todo puede ir mejor en nuestras vidas, ese sentir se transformó en algo tangible que puedo disfrutar todos los días y a cada hora estimulando mis sentidos a crear y componer nuevas canciones.

La hermosa magia de Yerba Mate
La hermosa magia de Yerba Mate

La verdadera magia de Yerba Mate

El placer que genera una buena conversación con yerba mate es difícil de explicar, pero no de promover o expandir dentro de nuestros propios círculos sociales no importando la edad ni menos del lugar de donde vengas una vez una persona me dijo que todos somos espejos de alguna u otra forma y compartir una tertulia mateando como decimos coloquialmente me ha dado luces de aquella afirmación tan acertada.

En mi caso lo he realizado con muy buenos resultados un ejemplo de aquello es mi madre en su último cumpleaños le regale un mate y bombilla para que así podamos generar vínculos en la sobremesa y a pesar de todo ha dado resultados así permitiéndome conocerla en otras facetas como persona. Incluso aquello dicho anteriormente aplica con mi abuelo el cual me cuenta que su madre tomaba yerba mate con una bombilla de plata que llevaba un corazón en la parte superior con su nombre grabado realizada de forma artesanal por convictos en la expenitenciaría de Santiago o anécdotas que dan cuenta de la tradición oral de historias simples pero bellas y jocosas que surgían en la cotidianidad del rubro de la construcción y en la ardua labor del campo, historias de vida de familiares y seres queridos que ya no están en el mundo de los vivos, gracias a estas conversaciones vuelven a existir durante un desayuno, almuerzo o cena y la gran culpable de aquello es la gloriosa yerba mate, convenciéndome cada día más de que es y será la mejor red social.

Otro ejemplo de lo dicho son las conversaciones con mis futuros colegas todos nos diferenciamos por edades, lugares diferentes de crianza, formas de ver la vida, creencias, gustos; etc. Pero la yerba mate nos une cada vez que compartimos conocimiento, experiencias o ponemos en la mesa nuestros puntos de vista acerca de política, literatura, cine o contingencia en las frías noches de Santiago de Chile luego de una jornada de estudio.

Disfrutando Yerba Mate solo
Disfrutando Yerba Mate solo

El deber de un padre

Para algunos puede ser el cigarrillo, para otros el alcohol, para mí un joven de 22 años más bien tímido y retraído la yerba mate se ha transformado en una entrada a poder socializar y dejar de lado el ser un poco misántropo incluso hasta con gente que no conozco en la calle o en el trasporte público camino a casa abriéndome puertas a entender y conocer nuevas formas de vida en un país cada vez más cosmopolita en el cual gracias a un tibio y cálido sorbo de yerba mate nos damos cuenta que a pesar de la distancia y las diferencias culturales podemos compartir y aprender unos de los otros.

Mi hija y yo disfrutando un poco de Yerba Mate
Mi hija y yo disfrutando un poco de Yerba Mate

Hace un año ya cumplo mi papel de padre con una niña hermosa y muy inteligente su nombre es Agustina Tiamat y cada vez que estoy con ella también acompaño ese momento ‘’mateando’’ por lo que se realizaron las consultas correspondientes a los médicos para ver desde qué edad es viable su consumo  junto a su padre y a pesar de que se aconseja desde los 8 años, nos dijeron que puede probar de a poco y desde los 3 años otras hierbas mixtas. A pesar de que aún falta para aquella fecha estaré más que preparado y dispuesto para enseñarle las bondades y las múltiples formas de tomarla todo eso acompañado de momentos que espero que mientras crezca vaya atesorando así como lo ha hecho su padre. Todo esto me lleva a pensar de modo reflexivo en la importancia que tiene la yerba mate en mi vida ¿es más que un alimento? Debo responder con un rotundo y categórico si existe un cariño, una conexión que va más ligado a lo sensitivo, cuestión que no deja de lado el romanticismo predominante al momento de cebar admitiendo que fue una de las primeras cosas que me encantaron a diferencia de otras infusiones, me guió hacia una considerable mejora tanto de mi salud física y emocional al momento de incluirla en mi alimentación y compartiendo más con mi entorno cosa que agradezco profundamente.

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